Sí, llevaba años pensando en hacer algo tangible en el campo del chocolate en la tierra del Piamonte. Así pudimos completar el proyecto del «Pequeño Museo del Chocolate», con la inestimable colaboración de mi amigo y colega Valerio Angelino Catella.

Aunque el Museo del Chocolate de Silvio Bessone empezó hace unos años, en un momento preciso de septiembre de 1970, cuando paseando por delante de una pastelería Silvio le dijo a su padre: «de mayor seré chocolatero». Un sueño que duró 40 años. El museo recorre esa época a través de los ojos de un niño que ni siquiera conocía a Willy Wonka pero soñaba con esa magia y quería formar parte de ella.

El Museo del Chocolate se encuentra dentro de la famosa Cioccolocanda. Una visita guiada le mostrará las etapas del procesamiento del cacao y la pasión de Silvio Bessone por el alimento de los dioses. Una experiencia única en la que también es posible (previa reserva) asistir a cursos de cocina y pastelería

El Museo del Chocolate de Silvio Bessone es una estructura privada de la empresa chocolatera del mismo nombre y se encuentra en Vicoforte, a 100 metros del espléndido Santuario Montis Regalis.

El Museo del Chocolate es un itinerario único, en el que una antigua maquinaria le recibe a la entrada y le conduce a través de una serie de paneles ilustrativos por parte de la historia que vincula a Carlos Manuel I, iniciador y financiero para la Casa de Saboya del majestuoso Santuario y la historia del cacao en Europa. Una breve ilustración explica dónde crece el cacao y cuáles son las variedades más significativas y, a continuación, le lleva hasta donde se alza un cartel que dice: ¡El chocolate según yo!

Así, Silvio le recibe en la primera de las dos habitaciones, no muy grande pero original.

La primera sala, también auditorio, está dedicada al mundo del cacao. Algunos pequeños plantones de cacao de Ecuador, Venezuela y Tanzania están acompañados por un lecho de vainilla Bourbon que está echando nuevos brotes, así como plátanos, piñas, papayas, dátiles, lichis, machete guaja, etc., que conforman el pequeño vivero interior. La sala cuenta con una gran pantalla donde se puede viajar con los ojos de aquel niño que soñaba con ser chocolatero a través de un recorrido desde la semilla hasta la barra.

¡El olfateador! ¡Es una experiencia ÚNICA! Se pueden probar y oler más de 44 variedades de cacao de todo el mundo en silos de Plexan especialmente instalados,

Las caras del cacao En un ambiente totalmente dedicado al cacao, Silvio ha dedicado la única y más importante pared a sus amigos agricultores, aquellos que con su sudor y sacrificio hacen posible que cada año dispongamos de un cacao excelente para transformarlo en Chocolate Artesanal.

La Chocolatería Artesanal se encuentra en la planta inferior del museo, pero no puede visitarse salvo en algunos casos programados y publicados en estas páginas.

La sala Metate! recoge objetos antiguos que Silvio ha utilizado a lo largo de los años, moldes y pequeños equipos, así como el primer Tostino, algunas medallas de maquinaria y copas que a lo largo de los años han visto a Silvio bessone ganar importantes competiciones mundiales, como la Coupe du Mond de la Patisserie, 1995-2001-2003, el equipo mundial de pastelería en 2006 y otras copas y trofeos internacionales, así como la cazuela «Discípulo de August Escoffier».

La bóveda, con un conjunto de lingotes de chocolate con leche negro y blanco y el legendario «Metate azteca del 1400» colocado bajo un relicario para que no sufriera daños.

Antes de irse, puede aprovechar el punto de venta, donde podrá cumplir todos sus deseos de compra. La gama de dulces y la interminable variedad de tabletas de chocolate y bombones de producción local son realmente interesantes.

Visita EXCEPCIONALMENTE PROGRAMADA a la FÁBRICA DE CHOCOLATE EL 16 de abril a las 10 h. ¡Exclusivamente CON RESERVA! para los invitados que reserven el almuerzo en el Museo del Chocolate.

enviando un correo electrónico a
ciocco@silviobessone.it